Diego
Castro llegó hace un año al Sporting como debilidad personal de Emilio
de Dios. El gallego fue una de las revelaciones de la temporada, con
juego, asistencias, exquisiteces y goles. Alguno fue espectacular, como
el que marcó en Valdebebas. El ojo clínico del director deportivo se
fijó ahora en Kike Mateo y en Jorge Pina. El murciano hizo un excelente
papel en el Eibar, hace tres temporadas, y en el Hércules, hace dos
campañas, aunque en la última encontró obstáculos extradeportivos que
lo alejaron de la titularidad. Pero sus buenas condiciones no pueden
ponerse en duda. El aragonés, que se presentará mañana en Mareo, tiene
fama de habilidoso, técnico, especialista en asistencias y con un buen
toque de balón, además de ser especialista en saques de falta.
     Tal
y como está diseñado el equipo rojiblanco, parece que el tridente
ofensivo que respaldará al delantero centro estará compuesto por tres
futbolistas que pueden ser calificados de jugones, uno de los últimos
adjetivos llegados a la gramática del fútbol para definir a los que se
recrean con el balón y hacen disfrutar a la grada. En teoría, y dadas
las cualidades de cada uno, la tripleta ofensiva podría formarse con
Diego Castro (derecha), Kike Mateo (enganche) y Jorge Pina (izquierda).
Los tres jugadores tienen cualidades y calidad suficientes para dar el
espectáculo que demandan las tribunas de El Molinón. Espero que todos
podamos divertirnos con los jugones de Emilio.