Las personas que se marean al levantarse y que experimentan una caída repentina de presión arterial podrían tener un mayor riesgo de desarrollar demencia o experimentar un ictus en los próximos 10 años, según ha puesto de manifiesto una investigación llevada a cabo por investigadores de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de la Universidad Johns Hopkins (Estados Unidos) que ha sido publicada en Neurology.
Para llevar a cabo el estudio, definieron la presión arterial baja al levantarse como una caída de al menos, 20 mmHg en la presión arterial sistólica o de 10 mmHg en la diastólica.
Con una muestra de 11.709 personas de unos 54 años de edad, los investigadores analizaron hasta en cinco ocasiones, durante un periodo de 25 años, la hipotensión ortostática, forma de presión arterial baja que se produce al levantarse.
Asimismo, siguieron a los pacientes para estimar el riesgo de demencia y de ictus. Durante el estudio, 1.068 personas desarrollaron demencia y 842 personas experimentaron un ictus isquémico.
De esta forma, descubrieron que aquellos que tenían hipotensión ortostática al comienzo del estudio tenían un riesgo 54% mayor de desarrollar demencia que aquellos que no tenían hipotensión ortostática al comienzo del estudio. Además, aquellos con hipotensión ortostática tenían el doble de riesgo de ictus isquémic